Nos vamos de viaje hasta Italia, más concretamente a los alrededores de Bolonia, donde es más que una tradición el plato que hoy cocinaremos.
Tanto la pasta como la salsa boloñesa nos hacen pensar en Italia, en su gastronomía imitada y practicada en todo el mundo, destacable por su gran variedad de sabores y aromas del mar Mediterráneo.
La pasta es un alimento básico en todo el mundo, cuyos ingredientes principales son tan fundamentales como harina, agua y huevo. A esta masa se le puede añadir algún que otro elemento más -como tinta de sepia, remolacha, tomate y espinacas- para conseguir pasta de sabores y colores -negra, violeta, roja y verde-. Su modo de cocinado es lo que se llama en términos culinarios "cocción a la inglesa", cocer un género en abundante agua hirviendo a borbotones, con mucha sal y destapado. Suele completarse con un "refrescado" para cortar el proceso de cocción y eliminar el exceso de sal.
La boloñesa se trata de una salsa espesa de tomate con carne picada, cuya base se fundamenta de cebolla y zanahoria; condimentada con orégano, principalmente.
Un plato altamente nutritivo, fácil, económico... y lo más importante, al que casi nadie se resiste!
Por supuesto, como no podía ser de otro modo, se lo dedico a la gran Familia Summa, increíbles amigos italianos e inmejorables personas!